Té negro Noches de Dublin

El Té Negro "Noches de Dublin" es una mezcla original de té y un toque de café.

Está compuesto por Té negro de Ceilan, chocolate negro, granos de café y flores de jazmin.

Aromas dulces a café y cacao.

Sabor intenso con final a cacao y un sutil toque de café.

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La Infusión de Té Negro "Noches de Dublin" de sabor intenso y achocolatado.

Es una bebida ideal para ser consumida durante la mañana o después de comer, gracias a su contenido medio en teína. Destacan de él sus propiedades digestivas, así como también por sus efectos revitalizante. Es una variedad de té negro de Ceila, rica en magneio y antioxidantes.

La variedad de Té Negro "Noches de Dublin" está compuesto por Té negro de Ceilan, chocolate negro, granos de café y flores de jazmin.


Como preparar Infusión Té Negro "Noches de Dublin":

Cantidad: una cucharada de postre es suficiente para una taza de 200 mililitros, mas o menos unos 10/12 gramos por litro de agua.

Temperatura: 100º - el Té Negro "Noches de Dublin" se debe preparar con agua a 100º.

Reposo: entre 3 y 5 minutos.


Recomendaciones de consumo: 

- Se puede consumir con leche.

- No recomendamos añadirle limón.

- Ideal para tomar durante la mañana después de comer.

- No es recomendable para niños.

- Se puede tomar frío.

Gran desayuno

A pesar de ser delicado por el jazmin, tiene un aroma potente y un sabor duradero. Ojo, no es un café ni un chocolate, su sabor es mucho más fino y ligero; pero acompaña genial a cualquier lácteo, ideal para el desayuno o media mañana.

    DELICADO Y SUTIL

    Sabor a té negro delicado con un aroma a cacao y café

      Té negro de Dublín

      Huele muy bien, pero es insípido

        Té negro noches de Dublín

        Lo probé porque me atraía la mezcla de té negro, café y chocolate. Desafortunadamente, aunque tiene un delicioso aroma a chocolate, es bastante insípido: el sabor no trasluce ninguno de los ingredientes. Lo tomé amediodía porque pensé que así me despejaría, pero no es muy estimulante y al final acabé echándome una siesta de dos horas. Me apena porque tenía la ilusión de poder incorporar un té negro chocolateado a mis desayunos.

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